Una gota en medio del océano
Somos personas que siguen creyendo que mejorar las cosas sí es posible, un grupo de trabajo que cuenta con profesionales de la educación de los niños, basada en la inteligencia emocional, y de la implantación de sistemas de gestión, que, con la ayuda de padres voluntarios, se ha propuesto mejorar la educación de nuestros hijos en el ámbito de su formación temprana para que ellos puedan afrontar los desafíos de la vida, sin tener que renunciar a quienes son realmente y a lo que esperan de ella.
Nuestra filosofía se basa en que nos parece importante reconocer que toda persona tiene un propósito en la vida, un don único, o un talento especial para ofrecer a los demás, y que, por lo tanto, es necesario que éste se desarrolle a lo largo de su vida para que se sienta plenamente realizada. Nadie mejor que los padres es más consciente de ello, y sin embargo aún hay muchos niños que, por desgracia, no tienen siempre la suerte de recibir esa ayuda en el ámbito de su familia.
Desde luego, los colegios o los distintos centros de acogida de niños desfavorecidos no pueden sustituir esa educación tan valiosa de los padres, pero entendemos que la introducción y aplicación de la inteligencia emocional, junto con un sistema mínimo de organización y de seguimiento de resultados podría ofrecerles una oportunidad de descubrir y aplicar conceptos tan valiosos como el autoconocimiento, la autoestima, la empatía y la solidaridad, en su comportamiento.
Dicho así parecen cosas muy técnicas, cosas de adultos, claro, pero en realidad se trata de cosas del cariño… de cosas que se pueden aportar a los niños simplemente jugando con ellos, valorando sus actitudes, dando buenos ejemplos, comprometiéndose a acompañarlos en su crecimiento, y en aquellos aspectos de la vida que no entienden y que no saben bien cómo gestionar. Se trata de que los niños aprendan a dialogar entre ellos y a gestionar pacíficamente sus diferencias, siempre bajo la supervisión de educadores adiestrados y sin que ellos tengan que imponer su autoridad por el mero hecho de ser personas adultas. De este modo, es frecuente observar una reducción de la conflictividad entre los distintos agentes sociales, viéndose, por tanto, facilitada la labor formativa de dichos centros. En definitiva, se trata de que los niños se sientan escuchados y valorados por lo que son.
Este mundo necesita de cada ser humano, de sus aptitudes, de su buena voluntad y altruismo para mejorar, y ese cambio no puede hacerse de otra manera que por la educación y el ejemplo.
Misión
Ofrecer una experiencia de formación práctica, novedosa y de calidad a profesionales de la educación, y a los propios alumnosde los centros, con el fin de incrementar sus competencias emocionales.
Visión
Ser considerados por nuestros clientes una solución a los conflictos y problemas de convivencia de los centros, ofreciendo un servicio de calidad basado en la innovación educativa, actualización permanente y profesionalidad del equipo de trabajo.
Valores
Nuestra forma de trabajar está marcada por los valores de Calidad, Innovación, Compromiso, Trabajo en equipo, Superación y Confianza.